One Piece Fanon
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Arco de la Caza Tesoros
Cazatesoros
Información
Número de capítulos por definir
Fecha de creación 02/04/19
Fecha de finalización por definir
Anterior Arco de Pluma Roja
Posterior Arco de Wind Jester
Creador Darkarchangel

El Arco de la Caza Tesoros es el vigésimo sexto arco de la historia de los Piratas del Ave Azul y el primero de la Saga de la Evolución.

Antecedentes

Los Piratas del Ave Azul se enfrentan al padre y hermanos de Jean en una competencia amistosa que al final resulta una lucha por la supervivencia de la autonomía de todos. Tras varios problemas familiares, un enfrentamiento contra misteriosos y peligrosos cazarrecompensas, una revelación, y varias reconciliaciones, Jean y compañía regresan con la Alianza.

Capitulo 638: Demonio Radiante

En algún lugar del Nuevo Mundo… 

Cinco barcos, cinco banderas con guadañas dobles, cinco hombres y mujeres moribundos en las proas. Otra reunión de los cabecillas de la Sociedad de los Parca se está gestando, y está vez, el líder supremo de la Sociedad se mira especialmente feliz. 

Azrael: Repítemelo sólo por confirmar. Encontraste a… 

Yibril:… a todos menos a la mujer de cabello negro. 

Azrael: Hmph… quiero oírlos. 

El Jinete de la Victoria se aclara la garganta entonces y comienza a hablar con las voces de los miembros de la familia Black. Sus exactas voces. 

Yibril: (con voz de John) Era Pluma Roja, (con voz de Jonathan) el clon joven Pluma Roja, (con voz de Jill) la chica de cabello púrpura (con voz de Jean) y el muchacho de cabello azul. 

Azrael: Vaya. Me impresionas, Yibril. 

Yibril: Y no conseguí solo sus voces. También tengo información sobre sus habilidades usadas a máxima potencia e hice que el buen Tartarus instalará dispositivos de rastreo en cada uno de sus barcos. Los cuales,  por cierto, funcionaron perfectamente. Recuérdame agradecerle a Ultra por ellos, ¿no, Baltazar? 

Baltazar: Pshe… 

El hombre pasa un monitor en el cual se pueden ver cuatro luces parpadeantes en un mapa. 

Yibril: Con esto, podrás ir a por ellos cuando quieras y tendrás completa ventaja. 

Con esta información, la sonrisa de Azrael se acrecienta, pero el desagrado de Baltazar, Réquiem y Thanatos es evidente. 

Azrael: Me complace mucho oír eso. 

Miquela: ¡Hmph! 

Baltazar: *murmurando* Perro afortunado. 

Israfil: *con desdén* Debo decir que en realidad estoy sorprendido. Conociéndote, los hubieras atacado tu solo para quedarte con la gloria. 

El joven jinete abre los ojos un poco demás al oír esto. Pero mantiene la calma y su coartada. 

Yibril: Por favor, Thanatos. No soy tan imbécil como para subestimar así a los enemigos. ¿Me crees estúpido? 

La Podredumbre no se lo traga para nada, pero al no tener pruebas, simplemente se limita a responder la pregunta retórica que le han hecho. 

Israfil: Ya sabes lo que creo de ti, Yibril. 

Yibril: Tsk… 

Azrael: Esto merece una pequeña celebración. La casa invita esta noche. Y mañana a primera hora, continuaremos con esta misión.  ¿Entendido?

Jinetes: Entendido. 

No toma mucho tiempo para que se escuche el barullo de una fiesta, aunque esta más bien parece el interior de un bar de mala muerte. Borrachos en el piso, gente orinando por la baranda, fumando cosas que no son tabaco, juegos, apuestas, hasta peleas de gallos y una truculenta competencia de dardos en una de sus agonizante presas. Yibril y sus hombres(los que no están heridos todavía) disfrutan del ambiente. 

Anubis: JAJA. Parece que al final las cosas te salieron bien. ¿No, jefe? 

Yibril: Así es. Pero guarda silencio, Anubis. Se que Don Cadáver sospecha de mi. Mejor mantengamos esto hasta mañana. 

Anubis: Vale, vale. 

A lo lejos se ve a Azrael acosado en un camastro, con una sangría en la mano y el monitor que le han dado en la otra. Este hace una señal a Tartarus, que anda ahí cerca para que vaya con el, y tras susurrarle algo al oído, este corre a con Yibril. 

Tartarus: Jefe. El Jefe “Jefe” dice que tiene un regalo para usted en su camarote. 

Yibril, extrañado, va a su habitación. Empieza a temer cosas, ¿Qué tal si sabe la verdad? Pero al abrir la puerta de su habitación, se encuentra solo con Michelle, la cual se le acerca lentamente mientras se relame los labios de forma seductora. 

Michelle: Azrael dice que te mereces un regalo por tu trabajo bien hecho. 

Acto seguido, la mujer apaga la luz y se aprecia su silueta mientras se quita la blusa y luego, acerca sus manos a las piernas de Yibril, el cual quita su rostro de preocupación y lo cambia por uno de deseo. Mientras, su jefe y “benefactor” mira con una sonrisa la pantalla con las luces que prenden y apagan. 

Azrael: Hmph…  esta no esta lejos. 

El hombre de cabello verde mira una luz en específico, conectada a un botoncito con la guadaña doble que prende y apaga, pegada a un casco de madera azul. La Ocean Spirit. En esta, su capitán, el buen Jean, se encuentra con Big Bird en su hombro, hablando con Samir, el cual limpia sus cuchillos junto a Isabel y Katrina, tal como es costumbre. 

Samir: ¿Mors?

Jean: Si. Un cazarrecompensas llamado Mors. 

Samir alza los ojos hacia el cielo como si este le iluminase con la pregunta, pero casi de inmediato los vuelve a bajar. 

Samir: Pues me suena el nombre, pero la verdad, mentiría si te dijera que sé algo. Lo siento. 

Esto molesta ligeramente a Jean, y no tarda en reprocharlo. 

Jean: ¿Nada en serio? Por favor. Estuviste catorce años con una banda de Cazarrecompensas. 

Samir: Si, como prisionero. 

Es evidente que lo que ha dicho Jean ha lastimado a su camarada. El peliazul se da cuenta y se arrepiente de inmediato. 

Jean: Lo siento, Samir. Fue grosero de mi parte. 

Samir: Je, no te preocupes, perdonado. 

Jean: Pero es que en serio quería algo de información. 

Big Bird, ¿Información, informa

Isabel: ¿Mors dijiste? 

La mujer, que ha estado limpiando diligentemente su espada todo el rato, se mete en su conversación. 

Jean: ¿Lo conoces? 

Isabel: Pues no exactamente, pero en la Marine hablaban mucho sobre un tal Mors. 

Jean: ¿Ah si? 

Isabel: Si Aunque es casi una leyenda. Le llamaban por el apodo de “Demonio Radiante”. Vicealmirante. Un héroe de la Marine de tiempos anteriores a Garp “El Puño” o Sengoku “El Buda”. 

En la mente de Jean y Samir se forma una imagen similar. Un hombre fuerte y gallardo acabando con los criminales. Cosa que les gusta pero a la vez les da escalofríos. 

Isabel: No obstante, su barco fue atacado por piratas y toda su gente murió. A él se le dio por muerto también, pero sobrevivió, fue rescatado y se recuperó de sus heridas. Por desgracia, se volvió loco por ese incidente. Empezó a asesinar piratas cruelmente y luego desapareció cuando la Marine desaprobó sus métodos. 

Jean: Hmphh… me pregunto si habrá sido él a quien papá se refería. 

Isabel: ¿huh? 

Samir: ¿Referirse que de que cosa? 

Big Bird: ¿Qué cosa? ¿Qué cosa? 

Jean: Oh, nada, nada. Bueno, sigan con lo que estaban, chicos. Gracias. 

Samir e Isabel: ¿huh? 

El peli azul se va, dejando a sus camaradas un tanto confundidos. Big Bird, en su brazo todavía, también lo está, pero Jean no le dice nada, esta muy ocupado hablando consigo mismo. 

Jean: (¿Será ese “Demonio Radiante” el que mató a mi madre?) 

Capítulo 639: Para que no me extrañes

Más tarde… 

Una vez más, el clima les ha jugado una mala pasada a los tripulantes de la Ocean Spirit y  ahora, se encuentran limpiando los estragos y secuelas. 

James: ¡Apágalo! ¡Apágalo! 

Mia: ¿¡Que crees que estoy haciendo!? 

La Bebedora y el Cazador están apagando un fuego en la popa ocasionado por un relámpago espontáneo. 

Katrina: ¡Mira, un ángel de nieve! 

Isabel: Creí que era granizo. 

Katrina: Ah, eso explica porque pincha.

La Llorona y la Cuchilla del Mar palean el hielo que cubre toda la cubierta de babor, producto de una tormenta de hielo repentina. A la par, Samir y Taylor usan jaladores de goma para retirar el agua de la cubierta, dejada por el hielo que ya se está derritiendo. 

Samir: No se si esto funcione. Bert dice que si dejamos agua, se filtrara la humedad y se pudrirá  la madera. 

Taylor: Bueno. Puedo crear una toalla gigante o algo. 

Bert y Evangeline sacan materiales de la bodega, Angélique esta al timón, anotando todo en sus bitácoras. Big Bird esta de vigía y Jean, Jean abusa un poquito de su autoridad de capitán para no hacer absolutamente nada. 

Jean: Ahhh, se siente bien. 

Al muchacho le hace bien, pues a pesar de todo, aún se está reponiendo de sus heridas. Es en ese momento cuando Bert y Evangeline llegan, con los materiales y algo muy loco bajo el brazo. 

Jean: ¿Y eso? 

Bert: Lo encontramos en la bodega. Tenía una notita dirigida para ti. 

Jean: ¿Para mi? 

El objeto que encontraron resulta ser nada más y nada menos que un estuche  de algún instrumento musical y otra notita con la frase “Para que no me extrañes. Papá.”

Jean: Aww, pa.

Acto seguido, Jean abre el estuche y se encuentra con una guitarra acústica de hermosa manufactura. 

Jean: ¡Genial! 

El peliazul la saca rápidamente del estuche y se la acomoda y comprueba que esté afinada, para sorpresa de sus camaradas, especialmente de Katrina. 

Katrina: ¡¿Sabes tocar?! 

Jean: Pues si, algo. 

Evangeline: ¿Por qué nunca nos dijo, capitán? 

Big Bird: Yo si sabía, yo si sabía, ahhhh. 

James: Si, y tampoco nos dices nada, pájaro estúpido. 

Jean: En mi defensa, no toco nada desde los siete años. No había tenido nunca una guitarra propia, usaba la de papá.

El muchacho empieza a tocar el acorde más sencillo que recuerda, el círculo de sol.  Y aunque oxidado al principio, pronto se ve que ha heredado el talento musical de su padre. 

Katrina: Nada mal. 

Mia: Oh, oh. Toca una canción. 

Jean: ¿Canción? Pero es que… 

Taylor: Vamos, no te hagas del rogar. 

Bert: Toca algo. 

James: Prometemos no burlarnos… tanto. 

Angélique : Por favor, Jean. 

Todo esto hace que Jean se ponga rojo como tomate, pero, ante la insistencia de sus compañeros, decide tocar solamente una canción, una romántica. 

Jean: Que lindos ojos tiene mi chata, como relumbran cuando me ven. Son negros negros como la noche, y tan serenos como mi fe. 

Todos escuchan anonadados la canción, pues también resulta que Jean es un excelente cantante. Pronto, Katrina corre por su violín, y usando su propio oído musical, lo acompaña en la armonía. 

Jean: Esos ojitos son mi esperanza, no me los quites nunca señor, no me los quites diosito santo, porque sin ellos muero de amor. 

El muchacho termina su canción y sus camaradas le dedican un breve aplauso, que le ruboriza aún más, especialmente cuando nota la mirada maravillada de Angélique. No obstante, el peliazul no puede dar las gracias pues se oye un grito ya bastante deseado. 

Big Bird: ¡Tierra! ¡Tierra! 

Angélique da un vistazo rápido por el catalejo y confirma. Han vuelto. 

Angélique: ¡Eiyuu enfrente, señores! 

Se puede notar la alegría y hasta cierto alivio en los rostros de todos. Pronto, llegan a Kettei, y a la entrada de la cascada. Ahí, Marcel se encuentra haciendo guardia, y al verlos llegar, llama por Den Den Mushi. 

Marcel: ¡Necesito a alguien acá arriba y avisen a Betula-san! ¡ Los del Ave Azul. Han vuelto al cuartel.  

Capítulo 640: Estancados

Con ayuda de Marcel y un gyojin desconocido, la Ocean Spirit baja a salvo hasta el río y puerto subterráneos. La nave atraca en un muelle desocupado, y sus tripulantes bajan, encontrándose con Betula ya esperándolos. 

Jean: ¡Betula-San! 

El muchacho corre para abrazar a su maestra y está lo aferra de vuelta con los brazos, bastante feliz de verle. 

Betula: Dijiste que volverías y volviste. Me alegro tanto. 

Jean: ¿Tan preocupada estabas? 

Betula: Ehm… algo. Por como pintabas el asunto, esperaba que te aparecieras hasta dentro de seis meses o que tu nombre estuviera en el periódico relacionado a otro evento de escala mayor. 

Jean: Pues si pasaron muchas cosas, aunque se resolvieron bien… y… 

Jean observa que la base no tiene su bullicio usual y todo está bastante más lento y relajado. Todos están o haciendo nada o no están, y eso le preocupa. 

Jean:… y te contaré más tarde. ¿Por qué hay tanta… quietud? 

Betula: Pues veras… es que las cosas siguen casi exactamente iguales a como estaban Cúa do se marcharon…

 Jean: Pero… estuvimos fuera casi un mes. 

Los piratas caminan por el puerto , siguiendo a Betula mientras esta le cuenta su situación actual. 

Betula: Belen y su escuadrón en el Pure Platinum siguen a la busca de Mondhuter. Pero recientemente le han perdido el rastro. Nadie sabe donde esta, nadie ha visto a su tripulación. 

Jean: Pshe… ya veo… 

Betula: Y Hollow va a seguir fuera un tiempo. 

Jean: ¿Encontró al tal Enzo Palermu?

Betula: En realidad no. Pero encontró a una tripulación que tiene tanto relación con este como con Canro Kitchen. 

Jean: ¿Tripulación? ¿Cuál? 

Big Bird: ¿Cuál? ¿Cuál? 

Betula: Los Piratas Joshidanshi. Si te suena el nombre, es porque su capitana, Yuridia “La Taeko”, es una supernova de la misma generación que tú. Tiene 127 millones de recompensa. 

Jean: Pues no me suena el nombre en realidad. Pero si esta en contra de Canro Kitchen, nos vendría bien como aliada.  ¿Qué hay de las Trillizas y todos tus contramaestres? 

Betula se ve un tanto decepcionada por la pregunta, pero no tarda en responder. 

Berula: Salvo por Belen, y Kin que esta haciendo reconocimiento, todos están aquí. No tenemos nada más. 

Esto desanima algo a los Piratas del Ave Azul, especialmente a James, el cual no puede evitar confirmar algo. 

James: ¿Nada en serio? ¿No encontraron una pista sobre C. C. o alguien?

James pregunta sobre C. C. por una razón bastante específica. Es el último comprador conocido de su hermana, ya tres años atrás. No obstante, Betula niega con la cabeza. 

Betula: Lo siento. No hay nada. Estamos estancados. 

James agacha la cabeza entristecido, y Evangeline pone su mano en su hombro para confortarlo. Sus compañeros también se ven abatidos, aunque no tanto como el y esto también hace sentir mal a Betula. 

Betula: Deberían aprovechar para descansar un par de días. Seguro que aún están cansados por todo su viaje y  tus “asuntos”, Jean. 

Jean: No hace falta. Estamos… ¡…! 

La mujer solo da un piquetito en el costado de Jean para hacerlo retorcerse de dolor. Todavía esta lleno de hematomas. 

Betula: Tómense este día. Y mañana… bueno, ya veremos. 

Los del Ave Azul terminan por aceptar la sugerencia del Zafiro del Mar. Taylor decide armar una hamaca con su poder y se queda dormido en esta junto a Samir. 

Katrina: ¡JAJA! ¡Full House, señoritas! Ahora paguen. 

Mia: ¡Demonios! 

Isabel: No estas haciendo trampa, ¿o si? 

Isabel, Mia y Katrina juegan cartas, y Katrina esta arrasándolas y a su dinero. James por su parte, ha decidido ir a visitar a Shane y Wendy. Esta última con un vientre cada vez más abultado, estos le notan deprimido, y tratan de animarle.

Wendy : Anda, amigo. Seguro que pronto encontramos una pista. 

Shane: Es más, te apuesto a que encontramos a tu hermana antes de que nazca nuestro bebé, estoy seguro. 

James: Gracias, chicos. 

Esto logra poner una sonrisa en el rostro de James, una pequeñita, aunque en el fondo, la pareja se ve desesperanzada. Al mismo tiempo, Jean y Angélique, junto a Big Bird, han ido a ver los destellos verdes del agua, tal como quería la Pelirroja antes de zarpar para ver a la familia de Jean. 

Angélique: Wow, es precioso. 

Big Bird: Precioso, precioso. 

Jean: Si qué lo es. Fue una idea grandiosa. Gracias por traernos aquí, Angie. 

Angie. Esta palabra resuena como un trueno por toda la mente de Angélique cuando su camarada de cabellos azules la pronuncia. Jean, jamás en la vida le ha dicho Angie. Solo Angélique. 

Angélique: Angie… 

Jean: Ah si… bueno, oí a Jona llamarte un par de veces así y… me gusta… 

El muchacho habla demasiado rápido y de manera atropellada, como si estuviera… nervioso. 

Jean: Pero si te molesta yo… 

Angélique: No, no. Esta bien. Jeje. 

Ambos se ruborizan algo al cruzar miradas e intentan bajar la cabeza de inmediato. Es una escena casi… tierna. O lo sería, si en ese momento, Big Bird no hubiera comenzado a gritar. 

Big Bird: ¡Que lindo! ¡Que lindo! ¡Ahh! 

Jean: ¡Ah si! Es muy lindo el paisaje. 

Angélique. Si. Si. Y… las luces. 

Pero Big Bird no hablaba de eso y comienza a reírse bajito. Según él, en realidad se carcajea muy fuerte. 

Big Bird: ¡Bobos! ¡Bobos! ¡Ahh! 

Jean y Angélique: ¿Eh? 

A la par, Bert y Evangeline se disponen a hacer los últimos arreglos en la Spirit tras el viaje. Ambos están revisando el casco cuando el carpintero nota una lucecita que prende y apaga, el botón de la guadaña. 

Bert: ¿Huh? 

Pero justo en ese momento, las trillizas aparecen en una visita sorpresa, distrayendo por completo a todos los que están en el barco. 

 Ink: ¡Holi! 

Tear: Buenas. 

Gift: ¿Qué tal su viaje?

La mayoría les miran raro. A fecha, la triada sigue siendo el grupo con el que han tenido menos trato, y en general les parecen extravagantes y hasta perturbadoras. 

Ink: ¿Y que hacen? 

Mia: Jugábamos cartas… eso. 

Tear: Oh, ¿podemos jugar? 

Bert es el único que se muestra genuinamente feliz de verlas. O al menos a Ink, a la que aborda directamente. 

Bert: Tengo que agradecerte infinitamente por el tatuaje. 

Ink: Ah… gracias. Pero ya lo habías hecho. 

Bert: Si ya se. Pero no tienes ni idea de lo que nos salvamos por este tatuaje. 

Ink: ¿en serio? A ver, cuenta. 

El veterano pirata cuenta a la trilliza de la más cada como convenció a John Black, según él, de dejarlos ser, gracias al tatuaje. Pero nadie más quiere oír la historia, Tear se queda viendo a los mujeres del Ave Azul mientras juegan cartas y Gift se vuelca de cabeza en la baranda, lo que la hace ver el botón de la Guadaña y su lucecita.

Gift: Hmmm. A ver… 

La chica, no pudiendo contener su tentación, se cuelga para alcanzarlo y logra arrancarlo de la madera. 

Gift: Oh, que bonito. 

Pero por estar jugueteando demasiado con el, tratando de averiguar que es, accidentalmente un chispazo sale de sus dedos y la luz deja de funcionar. 

Gift: ¡Ay no! ¡Se descompuso! 

La chica de la cicatriz en la mejilla trata de hacer que encienda de nuevo, sin éxito. Nerviosa, decide guardárselo en el bolsillo. 

Gift: Bueno. Lo arreglare y se los devolveré después. Nadie tiene que notarlo. Jeje. 

Evangeline: ¿Notar que? 

Gift: ¡Woahh! 

La mujer alada se le aparece de repente a la trilliza y está, de la impresión se acaba cayendo de cara en el muelle. Evangeline, que no tenía esa intención, baja de inmediato a ayudarla. 

Gift: ¿Qué demonios querías hacer? ¿Matarme? 

Evangeline: Solo quería saber que hacía ahí, señorita. 

Gift: ¿Qué que hacía? Ahmmm ¡Ah si! Yo miraba la cascada desde ahí. 

Evangeline: ¿La cascada? 

Gift: Si, la cascaaaaaa…. 

Las dos se quedan viendo como idiotas como un barco negro y muy dañado aparece por la orilla superior de la catarata. Casi al mismo, en el bolsillo de Betula, suena un Den Den Mushi. 

Betula: Aquí. Karma. 

Marcel: ¡Emergencia! ¡Manden a alguien arriba rápido…!   

Capítulo 641: Maquinas

Los que están más cerca, alcanzan a ver a Marcel que desesperadamente trata de detener el barco, el cual, es evidente que va demasiado rápido. 

Marcel: ¡No! 

Pero el Tritón fragata finalmente se ve sobrepasado y el barco cae del borde de la cascada, completamente descompuesto y directo a empalarse con los picos. 

Evangeline: ¡El barco! 

Los gritos de horror de muchos de quienes observan se empiezan a oír, alertando a los que están muy lejos para ver y saber. El barco está condenado, o eso parece porque ene el último segundo, alguien aparece desde abajo para su rescate. 

Shane: ¡Kairyu Ipponzeoi! 

Wendy: ¡Combate Tritón! ¡Waterslide! 

Justo antes de chocar con las estalagmitas, Shane ha usado el agua para lanzarlos nuevamente hacia arriba, y su esposa, la vuelve a manipular para deslizarlo de forma más o menos segura al agua. Esta maltrecho pero no despedazado, y eso ya es ganancia. 

Shane: ¿Estas bien, mi cielo? 

Wendy: *jadeo* si…  si, estoy bien. 

El esfuerzo es demasiado para la embarazada en su tercer trimestre y esto preocupa a su esposo, pero también le preocupa lo que acaba de suceder. ¿Qué le pasó al barco? ¿De quién es? ¿Cómo acabó ahí y porque no se detuvo? Toda la alianza presente pronto se aglomera, incluyendo Jean y Betula, y es la vocera la que se da cuenta. 

Betula: Velas de estilo oriental… ¡Ese es el Gold Plate! 

Shane: ¡Kin! 

El Gold Plate es fácilmente distinguible en su flota por sus barandas chapadas en oro. Oro que ya no tiene. Varios piratas, incluyendo a la vocera, Shane y Pluma Azul- Dorada suben al navío con preocupación. En la cubierta, yacen tirados los tripulantes, y su contramaestre está entre ellos. 

Jean: ¡Kin! 

Piernas Locas está en un estado deplorable. Tiene heridas por metralla en todo el abdomen, sangra por boca y nariz y sus normalmente temibles piernas están rotas, una de ella en varias partes. Aún respira, pero no reacciona, y por la abolladura en su casco, se puede decir que si no lo llevase, ya estaría muerta. 

Betula: ¡Médicos!  ¡Necesitamos médicos aquí y ahora! 

Taylor es el primero en aparecer en escena, seguido por Gareth y toda la unidad médica de los Piratas del Zafiro. Estos tratan desesperadamente de estabilizar a Kin y a su gente, todos graves, mientras que varios carpinteros y otros maestros artesanos ayudan a hacer un camino improvisado entre el barco y el suelo para que puedan llevar a los heridos a la enfermería. Todo esto empieza a desatar algo de pánico en el cuartel general. 

Pirata del Zafiro: ¿Qué les pasó? 

Pirata del Zafiro 2: Se supo en que sólo iban de reconocimiento, esto no tenía que suceder! ¡No tiene sentido! 

Betula, Jean, y los otros miembros del consejo observan con preocupación, especialmente Betula, pues se da cuenta de algo. 

Betula: Había 40 personas en ese barco cuando salió…  ahora solo hay 17…

Jean: ¿Qué demonios pasó? 

Mientras trasladan a Kin a la enfermería, esta recupera por un momento la conciencia.

Kin: ¡No! ¡No! ¡Déjenlos ir!

La pobre mujer está excesivamente alterada y comienza a llorar mientras da de gritos. Parece que no sabe donde esta, su mente está atrapada en lo que sea que le sucedió. Gareth, de inmediato va con ella y trata de calmarle. 

Gareth: Kin. Kin. Calma. Soy yo, Gareth. Estas en el cuartel, estas a salvo. 

El peliverde médico la toma de la mano en un intento de calmarle, y está la aprieta con fuerza. Betula y Jean van de inmediato a verla. Kin respira demasiado agitada y está al borde del llanto.

Betula: Kin. ¿Qué pasó?

Jean: ¿¡Quién les hizo esto!?

Kin: Ellos… atacaron… 

Jean: ¿Quiénes? 

Kin: Eran… máquinas… 

La Piernas Largas se vuelve a desmayar para preocupación y pánico de todos. 

Betula: ¡Kin! 

Gareth: ¡Está grave! ¡Necesita intervención inmediata! ¡Rápido! 

Gareth y los otros médicos se apresuran para trasladarla a la enfermería, dejando a todos ahí con un sentimiento horrible en el estómago y una amenaza que se cierne sobre ellos. ¿A que se refería Kin con “Máquinas”? ¿Por qué atacaron así? ¿Qué pasó con los otros hombres?    

Capítulo 642: Ya sabemos todos los detalles

Seis  horas han pasado desde el invidente con el Gold Plate, y el ambiente que se respira es de intranquilidad. 

Mark: ¿Nada por allá tampoco? 

Pirata del Zafiro: Nada. 

El contramaestre del Rough Diamond y su gente están investigando en el Gold Plate, ahora llamado “La Escena” para encontrar pistas. No obstante, sólo hay sangre y daños por armas de fuego, demasiado vago todo para poder llevar a una conclusión. 

Marcel: ¿Un puesto de Avanzada?

Fleur: Dos en realidad. 

Devon:  Y solo temporalmente. Hasta que averigüemos que sucedió. 

Marcel ha vuelto a su puesto de portero, pero la Alianza ha decidido aumentar la seguridad y poner más Gyojins y Tritones en las cercanías de la isla por si acaso. También hay debates sobre que se debería hacer. 

Shane: Yo digo que deberíamos mandar un grupo a investigar. 

Wendy: Es peligroso. Podríamos exponer a más gente a acabar así. 

Pero ya que aún no se ha llegado a una decisión, otros componentes de la Alianza permanecen, por decirlo de alguna manera, estáticos. Los Piratas del AVE Azul por ejemplo, solo hacen sus cosas del día a día. 

Jean: Ah si, recuerdo esta. Un halcón peregrino. 

El peliazul está observando el álbum de fotografías donde guarda su colección de plumas. La acción siempre ha sido un calmante para él . A la par, toma una pequeña regadera y la vierte sobre una pequeña plantita.  Parece que por una vez, Jean no olvida regar sus plantas, pero están muriendo de igual manera, pues por ansiedad,  las ha regado tanto que se están ahogando.

Angélique : Año 79, mes 6, día…

No muy lejos de ahí, la Pelirroja, como siempre, escribe su bitácora. Se le ve turbada al hacerlo, como siempre que debe escribir sobre un evento terrible. Sus demás camaradas, adu vez, se afanan en sus respectivas tareas o hobbies. 

Katrina: A las piernas. Siempre a las piernas. 

Katrina practica con sus cuchillos, Big Bird se acicala, James limpia su arma, Bert práctica sus golpes en el saco de box de su cuartel, Mia hace la cena e Isabel le ayuda, y Evangeline y Samir ponen el taller en orden.

Taylor, por su parte, no esta ahí. Continua junto al resto de médicos, atendiendo las heridas de los que iban en el Gold Plate. Solo llega cuando se hace de noche, la cual solo se nota porque la entrada del Cuartel ya no emite luz, esta exhausto, pero sus compañeros se ven ansiosos por respuestas, así que se toma un segundo para aclararles el asunto. 

Taylor: Lo siento, chicos, pero nadie sabe nada aun. Habrá que esperar a mañana. 

Jean: OK. Descansa. 

El médico pelirrojo se echa a dormir en su hamaca y, por no tener más que hacer, sus camaradas hacen lo mismo pronto, aunque su sueño es ligero, debido a sus preocupaciones. Es por esto, que todos se despiertan al oír un anuncio que da “El Altavoz”. 

Sonya: A todos los miembros disponibles del consejo de Todos Somos Esclavos. Se solicita su presencia inmediata en la sala de reuniones.  Repito. A todos los miembros del consejo disponibles. Repórtense de inmediato en la sala de reuniones. 

Con esto, Jean y Angélique salen de inmediato de sus respectivos cuarteles y van a donde los han llamado. Pronto se presentan Betula, siete de sus contramaestre, y la Triada. Todos van en pijama o ropas de dormir salvo por las hermanas, que parece aún no se habían acostado y traen sus atuendos normales. 

Betula: Quiero comenzar esta “sesión extraordinaria” pidiendo disculpas por el horario en el que les he hecho venir. 

Fleur: No se preocupe, Capitana. 

Angélique: Todos entendemos. 

Betula: Supongo que todos deben saber el porqué de esta reunión pero lo diré por si acaso. El asunto a tratar es el “incidente del Gold Plate”. 

A pesar de su cansancio actual, todos escuchan con gran atención y seriedad. 

Betula: El barco, comandado por la contramaestre, Kin, y que estaba en reconocimiento de nuestras aguas territoriales, apareció ayer pasado el medio día en la entrada del cuartel en pésimas condiciones. De los cuarenta tripulantes solo regresaron diecisiete, los otros veintitrés están desaparecidos, además de el saqueo al barco, todo por parte de quien La contramaestre se refirió como máquinas. 

Ink: Si, si. Lo sabemos, Betu-san.

Jean: ¿hay nueva información? Mark, ¿tu y tu gente encontraron algo? 

Mark: Nada concluyente. 

Betula: Pero si hay nueva información. Gareth, por favor. 

El médico es el que parece más cansado de todos, pues se la ha pasado atendiendo heridos día y noche. No obstante, en cuanto habla, su voz se impone. 

Gareth: Comenzaré diciendo que afortunadamente los diecisiete heridos, incluyendo a la Contramaestre Kin, han despertado y se espera una recuperación completa de sus heridas. 

Con estas palabras, se oyen varios suspiros de alivio y se alcanza a ver que los rostros del consejo se relajan. Luego el peliverde continúa. 

Gareth: Los diecisiete tripulantes nos han dado su testimonio y ya sabemos todos los detalles del ataque. 

Con estas palabras, todos le escuchan con aun más atención que antes.

Gareth: Los atacantes, las máquinas a las que se refería Kin, son los tripulantes de los Piratas Golden Doubloon.     

Capítulo 643: Particularidades

Ink: ¿Los Piratas Golden Doubloon? 

Gareth: Según los testimonios, así fue como se presentaron. “Piratas Golden Doubloon”

Wendy: ¿Sabemos algo de ellos?

Silvya: Yo si. En el termino amplio, son prácticamente novatos, pero han sido una banda de lo más infame.

Betula: También los conozco. Y Silvya no exagera en su descripción. Si hubieran aparecido un año antes, seguro serian de la Peor Generación. 

Angélique: Espera, ¿Quieres decir que tienen Supernovas? 

Betula: Por lo menos una. Su capitán. Pandora Payne, alias “Cañón de Oro”. De tu misma generación, Jean. 

El Zafiro del Mar mira a su alumno al decir esta frase, y esto hace que el muchacho se ponga serio. 

Betula: Su recompensa es de 197 millones de belies por su cabez…

Silvya: Ya no. Se la subieron hace como tres días. Ahora es de 247 millones. 

Jean: Tsk... 

Silvya: Según sé, son lo que se podría decir, Caza Tesoros. Van tras el oro, las joyas y otros metales preciosos. Han masacrado a muchísimos barcos mercantes, aunque también han atacado a otros piratas, y les subieron la recompensa por atacar el barco de un Rey que iba al Reverie, aunque no lo lograron, pero si escaparon.

Gift: Todo por dinero… Que asco. 

Esta información pone de nervios al consejo, pero también hace que sus miembros comiencen a conectar puntos entre los Golden Doubloon y el ataque al Gold Plate. 

Fleur: No me digas que lo que le hicieron a Kin y a su gente fue por robar las molduras del Gold Plate. 

Gareth: Según ella y su tripulación, el ataque comenzó por eso, pero luego escaló por otra razón…

Todos los miembros del consejo quedan sorprendidos al oír estas palabras. 

Trillizas: ¿Otra razón? 

Gareth: Si… 

El médico peliverde aprieta los dientes y los puños. Se le ve muy furioso, y siendo la perdona tan calmada y amable que es, esto no le gusta nada a sus aliados y camaradas.

Gareth:... Los Golden Doubloon querían prisioneros para venderlos como esclavos. 

Los ojos de todos se abren como platos , dejando ver en muchos casos, venas no solo rojas por el cansancio, sino por la ira. 

Gareth: Según Kin, debido a las “particularidades”  de ella y de sus tripulantes, Payne y su gente decidieron que podían conseguir todavía más dinero capturándolos y vendiéndolos en el Bajo Mundo. 

Jean y compañía, piensan en Kin y sus camaradas. Piernas Largas, Brazos Largos, Tritones y Gyojins. Todos ellos con un altísimo precio en el Mercado Negro y aun mayor en las subastas humanas. 

Jean: Aun así, no entiendo como Kin y su gente acabaron así de heridos. Ella es una guerrera orgullosa y tenaz,  y también sus hombres. 

Gareth: Kin y su gente obviamente no se iban a dejar esclavizar sin ofrecer pelea, pero fue por defenderse que acabaron así. Aparentemente, los Golden Doubloon también tienen “particularidades”. 

El como dice esta palabra llama la atención de todo, y es la Primer Oficial del Ave Azul quien conecta el punto. 

Angélique: Maquinas. Eso que dijo Kin de que eran maquinas… 

Gareth: Es porque si son máquinas, al menos, en parte. 

Esto remite a Jean al recuerdo de una persona en particular, la inventora de la tripulación de su padre… y sus prótesis mecánicas. 

Jean: Cyborgs… 

Gareth: Exactamente. Según describieron los hombres de la Contramaestre, la fuerza física de los Golden Doubloon era como si enfrentaran a un gigante o un rey marino. Y la potencia de fuego de sus partes robóticas, era como enfrentar una flota hecha de personas.

La forma en como describe el peliverde a los Golden Doubloon los hace sentir, aparte de furiosos, nerviosos, pero Gareth aun no ha terminado de hablar y ellos deben de escuchar.

Gsreth: Cuando se hizo obvio que no podían ganar, los hombres del Gold Plate trataron de pedir refuerzos, pero estos tipos anularon sus comunicaciones, por eso tuvieron que escapar.  Pero no todos pudieron hacerlo… los veintitrés desaparecidos…  los secuestraron para venderlos. 

Gareth deja de hablar, y la verdad es que sus aliados tambien ya oyeron suficiente. Secuestrar personas… Vender personas… sus amigos y aliados, secuestrados para ser vendidos. Esto indica una sola cosa. Sin saberlo, los Golden Doubloon han declarado la guerra a todos somos esclavos. 

Betula: Entonces esta claro, caballeros y señoritas. Nuestras prioridades ahora son dos. Uno: Rescatar a nuestros aliados. Dos: Acabar con los Golden Doubloon. Son una amenaza que no podemos dejar pasar. Ahora, ¿Quién se…? 

Pero antes de que pueda terminar la pregunta, ya hay cuatro personas de pie. 

Jean/Trillizas: ¡Yo me ofrezco! 

Esto sorprende a Jean especialmente. Nunca le ha parecido que las Trillizas estén realmente comprometidas con nada, pero parece que se equivoca. 

Tear: Si se trata de maquinas, mis “particularidades”… 

Gift: Y las mías … 

Tear Serán las ideales para enfrentarlos. 

Ink: Y lo de la fuerza de gigante da igual, yo parto más culos.

Jean: Si nuestros aliados están en peligro, los traeremos de regreso. Además, Evangeline, mi  inventora, puede ser especialmente útil enfrentando a las máquinas.

Angélique: Apoyo esa moción.

Ante esto, los Piratas del Zafiro presentes observan a su capitán, la cual esta especialmente pensativa, y tras unos segundos, cierra los ojos, suspira, y finalmente dice…

Betula: La Triada de Sangre ira.      

Capítulo 644: Ambos iran

Jean: ¿Qué?

Nuevamente, Jean se sorprende, aunque esta vez, no de la mejor manera. Su mentora lo nota y procede a explicarse brevemente. 

Betula: Las Trillizas tienen razón. Sus habilidades son apropiadas para esta misión. Además, las tres son de lo más competentes. 

Ink: ¿Lo somos? 

Jean no se ve satisfecho, y todos se dan cuenta. Es por eso que Angélique decide voltear la balanza hacia él un poco. 

Angélique: No contradigo tu razonamiento, Betula-san. Aunque puede que sea difícil para la Triada transportar a los 23 secuestrados de vuelta a la base en el Black Roselia. Además, ellas no cuentan con un médico y es probable que los secuestrados estén en malas condiciones. Y considero que si bien enviar un numero reducido ayuda al sigilo, uno ligeramente mas grande ayuda a reducir desventaja numérica en caso de combate directo, el cual si se espera. 

Su capitán se ve feliz con sus fundamentos, y la vocera de la Alianza, pensativa otra vez. Tras meditarlo un poco, el Zafiro del Mar quita su mano de su mentón y llega a una conclusión. 

Betula: Son buenos puntos. Muy bien. Ambos irán . 

Jean y Angelíque: ¿Eh? 

Trillizas: ¿Huh? 

Betula: ¿Los que estén a favor de que vayan ambos grupos?

Ni el peliazul ni las hermanas de cabello rizado se ven conformes con esta resolución, pero al ver a todos los demás alzar la mano, no les queda opción que alzarlas tambien. 

Betula: Esta decidido entonces. 

Gareth: Bien. Necesitaran esto. 

El medico de cabello verde saca de su gabardina un trocito de papel que se mueve. Una Vivre card al parecer. Tiene escrita, además, la sigla PP encima. 

Gareth: Kin logro quitarsela a uno de los enemigos. Aparentemente, pertenece a Pandora Payne.

Tanto Jean como Tear extienden la mano al mismo tiempo. Gareth va a dársela primero al peliazul pero al ver la otra mano, duda un poco y se hace para atrás. Finalmente, llega a la solución de partir el pedazo por la mitad y dar una diminuta parte a cada uno. 

Gareth: Bien. 

Betula: ¿Qué tan rápido pueden salir? 

Jean: En cuanto carguemos los recursos necesarios. 

Tear: Igual. 

Betula: Bien. Tendré a alguien en la cascada para ayudarlos a subir.  Se levanta la sesión. 

Todos se retiran tras estas palabras. La Triada sale corriendo hacia su pequeña nave, mientras que Jean y Angelíque hacen lo propio yendo a la Ocean Spirit, pero para no perder tiempo, Jean toma a la pelirroja en brazos y sale volando. 

James: Ahí vienen. 

Big Bird: Ahí vienen. Ahí vienen. Ahhh.

Tras el primer aviso para que se reuniera el consejo, los Piratas del Ave Azul no volvieron a dormir, se han quedado esperando noticias. En el momento que Jean aterriza y los ve, da la orden. 

Jean: Preparen el barco y los suministros. Vamos a salir. 

Bert: ¿Qué sucede? 

El peliazul y la pelirroja proceden a informar rápido a sus camaradas sobre la situación y su nueva misión. Todos expresan su alivio por Kin y los heridos, pero tambien su enojo por los motivos de sus enemigos y ahora objetivos. 

Katrina: Esclavistas entonces. 

Angélique: Por desgracia. 

James: *escupe* Escoria de mierda. 

Isabel: Entonces, iremos nosotros. 

Jean: Si, pero la Triada tambien. 

Jean, una vez más,  se ve molesto, pero esta vez es ignorado. 

Angélique: Hay que prepararnos. 

Todos los del Ave Azul proceden a vestirse y luego alistan comida, madera, suministros médicos y pólvora. James, en particular, alista su blaster y su revolver. Se ve serio, demasiado serio. 

James: Tal vez esto pueda llevarme a ti, Jane. 

Tras una hora apenas, todos están listos. En el muelle, las Trillizas ya están listas y los esperan medio hastiadas. 

Gift: ¡Al fin!

Ink: ¡Ya era hora! 

Tear: Shh…  chicas. ¿Listos, Ave Azul? 

Jean: Más que listos. 

Dicho esto, ambos grupos se disponen a zarpar, pero justo antes de hacerlo escuchan a algjien gritando. 

Kin: ¡Esperen! Agh… 

En bata de hospital, llena de vendas y aun conectada incluso a una bolsa de suero, la herida Piernas Largas llega corriendo al muelle, con un medico detrás.  

Médico: ¡No siga! ¡Se lo suplico!

Los Piratas y las ladronas observan asombrados y preocupados a la mujer, la cual jadea un momento y luego los mira, revelando al no tener sus gafas, unos ojos igual de rojos que si las tuviera. 

Kin: Háganme un favor, ¿si? Traigan a mis chicos a casa y pateen el culo de esa horrible bruja hasta la luna. 

Ante esto, tanto Jean como las Trillizas le sonríen. 

Jean: Lo haremos.

Trillizas: Seguro. 

Los barcos zarpan entonces, y con la ayuda de Tear y un par de gyojins, la Ocean Spirit y el Black Roselia suben de la cascada y dejan la base.       

Capítulo 645: De esclavos y oro

Mas tarde, en alguna otra parte del mar… 

Empieza a amanecer pero aun esta oscuro, muy oscuro. Y mas al interior de la bodega de un barco. En esta, se oyen sonidos que helarían la sangre en otras circunstancias. Llantos leves, jadeos, respiraciones entrecortadas. Luego, se abre una puerta, dejando pasar la luz. 

Mujer: Aghhh, maldición. 

Ahora, se puede ver lo que hay en la bodega, personas. Algunas con brazos largos, otras con piernas largas, algunos con extremidades de mas, otros con cola, algunos con escamas, otros con pelaje, pero todos abatidos, todos encadenados. 

Mujer: ¿Qué quieres, desgraciado? 

El que ha abierto la puerta es un hombre, de aspecto regular. No muy alto ni muy bajo, no muy gordo ni muy flaco ni tampoco muy fuerte. Aunque aun en la media luz se le distinguen grandes y numerosas cicatrices. Pone una charola con varios cuencos de arroz cocido en el suelo y una jarrita con agua. Insuficiente para tantos prisioneros. 

Hombre: Si quieren seguir viviendo, mejor cómanlo.

Mujer: No, gracias. No queremos tu “hospitalidad”. 

A su celador, no obstante, no parecen importarle las palabras de sus prisioneros, y se dispone a cerrar la puerta tras de si. 

Hombre: Muéranse entonces. 

El hombre deja la bodega, la cual es vigilada por algo o alguien grandote, metálico y dorado, con algo que emite luz en donde debiera estar su cara. El hombre solo le ignora y se dispone a salir de ese pasillo que huele a muerte, solo para ser interceptado por alguien mas. 

Hombre: Pshe… ¿Qué quieres ahora, Eddog? 

Quien lo intercepta es alguna especie canina de Mink con dientes particularmente torcidos. Lleva la lengua de fuera, un ratoncito en el hombro y… ¿una ventana en el abdomen? Incluso se pueden ver sus intestinos desde ahí. 

  • Vigía de los Piratas Golden Dobloon: Eddog “Sabueso” y su ratón Nibble. 

Eddog: Cállate, Meatsack. Ahora, ¿ya le diste de comer a los prisioneros?  

Meatsack: Seh, seh. 

Eddog: Bien. Entonces ahora ve con Ernest. Tiene una tarea para ti. 

El mink se queda ahí y súbitamente se sienta en loto y empieza a rascarse la espalda con un pie. “Meatsack”  por su parte, va a otra cubierta, en la cual, parece haber una pequeña forja que nadie usa y varios montones de oro, aun con madera pegada, el oro del Gold Plate. En su lugar, un hombre grandote, sin una pierna, con prótesis de metal, bazos de metal y visor en vez de ojos, funde el valioso metal solo poniéndolo en su mano y derramándolo en moldes con forma de lingote. 

Cyborg: Oh, Meatsack. Ahí estas. Lleva esto a la capitana. 30 lingotes de oro. 

  • Herrero de los Piratas Golden Doubloon. Ernest “El Ganador” 

Meatsack: ¿Por qué yo? 

Ernest: Porque eres Meatsack de mierda, porque más. Ahora llévalo. 

Meatsack hace lo que le piden de mala gana. Metiendo los lingotes en una bolsa y cargándolos a su espalda, este camina con dificultad por el peso a través de los pasillos del navío. En su camino, se encuentra con otro Mink, un panda, el cual parece juguetear con un montón de herramientas que salen de uno de sus brazos. 

Mink panda: Deberías ya de aceptar la “mejora” que te ofrece la capitana, Meatsack. 

  • Carpintero de los Piratas Golden Dobloon. Red Randall “El mil usos”

Randall: Te ira mejor. “Serás” mejor. 

Meatsack se queda parado un momento para escuchar a su compañero, pero no le mira, y no tarda en seguir su camino. 

Meatsack: Tal vez luego. *para si mismo*(Cuando este muerto.) 

Finalmente, llega a lo que parece ser un despacho. Al abrir la puerta, puede apreciarse a una mujer sentada en un escritorio. Cabello y labios azabache, ojos de zafiro y piel chocolate. Un cañón de oro y plata apoyado en sus pies y monedas en sus dedos que cuentan. Nada mas y nada menos que su capitana.

  • Capitana de los Piratas Golden Doubloon y Supernova. Pandora Payne” Cañón de Oro”. 

Meatsack: Su oro, “capitana”. 

El hombre solo deja caer el saco en el escritorio, haciendo un estruendo y casi quebrándolo por el peso. Pandora, por su parte, se ve complacida. 

Pandora: Gracias, Meatsack. Ahora, sobre la mejora… 

Meatsack: Ya le había dicho que no estoy interesado. Ahora, si me disculpa… 

Pandora: Oh si, si, claro. 

El hombre se da la vuelta y se dispone a marcharse, pero… 

Pandora: Solo dame el lingote que falta. 

Meatsack: ¿Disculpa? 

Pandora: Ernest dijo que enviaría 30 lingotes al alba. Aquí solo hay 29. 

Meatsack: Pues yo no lo tengo. 

El hombre se dispone a marcharse otra vez, pero una figura, no mas grande que él, se le aparece enfrente. Esta emite un sonido metálico que pone de nervios al hombre. 

Pandora: Sabes muy bien que en mi barco no se tolera el robo. Entrégame el lingote. 

Meatsack: ¡Que yo no lo tengo! ¡Debió ser Ernest! ¡Lo juro! 

Pandora: Muy bien…

La mujer se levanta de su escritorio y empieza a guardar algo del oro en una caja fuerte, ya sin mirarlo. 

Pandora: Cutie. Castigo. 

Súbitamente, la figura que interceptaba a Meatsack salta sobre él, lo tira al suelo, lo toma del cuello y empieza a propinarle de golpes en la cara tan rápido que este no puede ni defenderse.  Tras unos minutos, la mujer termina de guardar el oro, y voltea de nuevo a Meatsack, el cual yace apenas consciente en el suelo. 

Pandora: Pshe… Débil. Cutie, Regrésalo a su cuartel. A ver si se le compone el cerebro y acepta la mejora con eso. 

“Cutie” hace lo que le dicen y saca al pobre hombre arrastrando de un pie. Mientras, Pandora se dispone a cerrar la caja fuerte, con exactamente 30 lingotes de oro en ella.        

Capítulo 646: ¿Cuál es tu maldito problema?

Mientras tanto… 

Los grupos de la Ocean Spirit y el Black Roselia van avanzando a paso veloz  por el mar. El clima, por una vez, parece estar siendo benigno con ellos. Aprovechando eso, mediante unas cuerdas, los barcos se unen uno con otro, para permitir a sus tripulantes moverse de un lado a otro. En este caso específico, Gift y Tear suben al barco de los del Ave Azul. 

Tear: Muy bien, tipos. Hagamos esto rápido. 

Gift: Y rápido en serio. Ink esta al timón y esa la verdad no es la mejor idea. 

Ink: *gritando en la lejanía con voz de anciana* ¡Moriremos todos! 

Jean: Aha. Nos daremos prisa. 

Angélique: Tenemos que pensar en un plan para rescatar a los prisioneros y enfrentar a los Piratas Golden Doubloon. Tenemos que…

Pero las dos trillizas ahí presentes se miran una a la otra y sonríen, para luego sonreírle a sus aliados.

Gift y Tear. Ya tenemos uno. 

Todos los del Ave Azul: ¿Lo tienen?

Los piratas se ven genuinamente sorprendidos de las hermanas ladronas, y estas solo se muestran complacidas por ello. 

James: ¿Y cuál es? 

Gift: Por ahora, seguir la Vivre Card hasta que podamos avistarlos. 

Tear: Luego, cuando estemos bien seguros de que los tenemos en la mira, nosotras nos adelantamos con el Roselia. 

Gift: Ink nos camuflara y nos infiltraremos en su nave para averiguar la localización de los prisioneros. 

Tear: Con la información. Romperé el timón de su nave para evitar que vayan mas lejos. 

Gift: Luego los llamamos a ustedes, y en lo que llegan, empezamos a destruir su barco por dentro para llamar la atención. 

Tear: Eso los distraerá. Luego ustedes podrán rodearlos y atacarlos por sorpresa. 

Gift: Mientras, aprovechamos para sacar a los prisioneros *en voz baja* y tal vez robar algo bueno si es que encontramos algo. 

Tear: Una vez tengamos a todos, nos largamos de ahí y los hacen picadillo con los cañones de su navío u otra arma de fuego de alto poder.  ¿Qué opinan? 

Los piratas no dicen nada al principio, solo se quedan con los ojos bien abiertos. Pero al cabo de unos segundos, nadie puede replicar nada. 

Angélique: Es… ¡brillante! 

James: Abarcaron todo.  

Mia: Sorprendentemente…

Isabel: Shhh… Mia. 

Tear: Je. Por como lo dicen, pareciera que nos creían idiotas. 

Mia: ¡…! 

Katrina: Ay pero claro que no… tanto. 

Big Bird: Tanto, tanto, Ahhh. 

El único que no comenta nada es Jean, el cual solo permanece en silencio con la boca torcida, los brazos cruzados y el ceño fruncido. Esto pone un poco molestas a las hermanas, pero aun así, le preguntan otra vez. 

Tear: ¿A ti que te parece , Jean? 

Jean: ¿Qué?  Ah, si, si. Es excelente… 

Pero él sigue con su rostro molesto, y las hermanas no pueden tolerarlo más. 

Gift: ¿¡Cual es tu maldito problema!? 

Esto impacta a todos, especialmente a Jean. Nadie nunca las había visto así de enfadadas. 

Tear: ¿Saben que? Tal vez sea mejor que empecemos a adelantarnos, incluso desde ahora. Así  habrá menos riesgo de que los vean.

Angélique: Ah… ok… 

Las dos chicas de cabello alborotado saltan a su navecita y cortan las cuerdas, para luego meterse raudamente a la cabina. En la Spirit, todos observan con sorpresa e incluso sintiéndose mal, especialmente Jean, que ahora tiene un nudo en la garganta. 

Más tarde, en otra parte del mar… 

Las cosas se ven un tanto pesadas en el Santa Morte, la nave insignia de la Sociedad de los Parca. ¿La razón? Su líder está furioso. Azrael se encuentra en su despacho, hablando por Den Den Mushi con alguien. O mas bien, gritándole. 

Azrael: ¡Me mentiste! ¡¿Verdad!? 

¿??? : Cálmese, que yo no le mentí de nada. 

Azrael: ¡No te hagas la lista conmigo, Ultra!  ¡Una de las señales! ¡La que estaba siguiendo precisamente, desapareció! 

Azrael tiene el monitor que le había dado Yibril en la otra mano . Este ahora solo ostenta tres lucecitas y están muy lejos.  Es por eso que Azrael grita al Den Den Mushi, le reclama a la creadora del aparato, la cual trabaja en la oscuridad en otro navío de la Sociedad. 

• Miembro de alto rango bajo las ordenes del Jinete de la Guerra y Líder de la unidad científica de la Sociedad de los Parca. Ultra “Megarma”

Ultra: ¡No me paso de lista! Ya le dije que la señal no es perfecta. Para empezar tiene un rango limitado a donde tenemos babosas territoriales y no tenemos tantas. Segundo, la señal se puede interrumpir por tormenta eléctrica y dígame donde estamos. ¡En el maldito Nuevo Mundo! ¡Espere a que aparezca otra vez! 

Azrael : ¡Eso mismo me dijiste ayer y la señal sigue sin…! 

Pero en ese momento, al mirar de nuevo al monitor, la cuarta luz vuelve a brillar en este, y mucho mas cerca de lo que antes estaba. 

Azrael: ¡…! Te llamo luego. 

Ka’cha

Ultra: Pshe… loco. 

La científica sigue trabajando  en donde quiera que este, mientras que Azrael sale de su estudio con el monitor en la mano y una nueva sonrisa, lo que extraña a su gente, pues hasta hace unos minutos, todos sabían que estaba furioso. 

Azrael: ¡Señores! ¡Nuevo curso!         

Capítulo 647: Humo Negro

Dos horas más han  pasado y  la Ocean Spirit sigue su camino,  con la Vivre Card de Payne en la mano de Angélique y el timón en la otra. Esta preocupada, no solo por la misión, tambien porque el barco de las trillizas ya no es visible a simple vista, y porque Jean no ha dicho un sola palabra desde que Gift le grito. 

Jean: … 

El joven capitán se la ha pasado en el bauprés todo ese rato, con su nueva guitarra, tratando de lograr un acorde específico. No obstante, por el hórrido sonido que emite, se nota que no lo esta haciendo muy bien. 

Angélique: Bert. ¿Podrías encargarte del timón un segundo? 

Bert: Claro. 

La pelirroja entrega el papelito en su mano y la rueda de mando al carpintero para ir a ver a Jean. Este solo le dedica una mirada rápida  y luego sigue con lo que estaba. 

Angélique: ¿Todo en orden, Jean? 

Jean: Aha… 

Angélique: ¿Seguro? 

El peliazul, que ha seguido tocando en todo momento, vuelve a fallar el acorde y esta vez se lastima un dedo por el metal de las cuerdas. 

Jean: Aghh… no. 

Angélique: ¿Tiene esto que ver con las trillizas? 

La navegante se da cuenta de que su capitán esta avergonzado y esta tratando de bajar la mirada. 

Angélique: Jean. 

Jean: No… Tal vez…  si. Tsk… ¿Fui muy cretino con ellas? 

Angélique: Algo, si. 

Esto avergüenza mas al muchacho todavía. Angélique ahora se sienta junto a él, tambien en flor de loto. 

Angélique: ¿Qué tienes en contra de ellas? ¿Te hicieron algo? Has estado actuando muy raro desde que Betula las eligió a ellas y no a ti. 

Jean: No tengo nada en su contra y ellas jamás me han hecho nada. De hecho siempre han sido amables.. A su loca manera y sin contar lo de esa vez que las conocimos

Angélique: ¿entonces?

Jean: Es más… cosa mía. Extraño estar en control, ¿sabes? Y con lo que paso con papá y estando en la Alianza. No he estado tomando las decisiones últimamente. 

Angélique: ¿Por eso querías esta misión solo para nosotros? 

El peliazul asiente. 

Jean: Estoy siendo egoísta, ¿verdad? 

Angélique: Un poco. Pero no te agobies. A veces hace falta ser un poco egoísta. Solo que, este no es el momento correcto. Hay vidas que dependen de esta misión. 

Jean: Si… Es cierto, tienes razón.

Angélique : ¡Woah! 

El peliazul se levanta súbitamente, lo que toma por sorpresa a Angélique y por la posición en la que esta sentada, hace que se voltee. 

Jean: Voy a hacer las cosas bien… me disculparé con las trillizas. 

Angélique: Sep. Ese ese es el Jean que conozco.  Aunque creo que tendrás que esperar un poco. Desde hace media hora que ya no veo a su barco. 

Jean: No hace falta. Para algo existen los Den Den Mushi, ¿no? 

El muchacho sonríe y ella le sonríe de vuelta. Jean toma entonces el Den Den Mushi, marca y espera. Pero nadie contesta. 

Jean: Hmm… que raro. Ni siquiera suena. Es como si estuviera descolgado. 

Angélique: Tal vez no hay señal, o están llamando a alguien. 

Jean: Supongo que… 

Pero en ese momento, se oye un grito desde el nido de cuervo. Big Bird cono vigía, da la alarma de algo.

Big Bird: ¡Humo al frente , humo al frente! ¡Ahhh! 

Todos en el barco voltean donde indica su emplumado camarada. Es cierto. Hay humo. James usa su mira telescópica para ver mejor y tratar de identificar que sucede. 

James: El humo es negro. Sea lo que sea, sigue quemándose. 

Y entonces, como rayo, todos tienen el mismo terrible pensamiento. 

Samir: Oigan… el Black Roselia esta hacia allá . No creerán que… 

Taylor: No. Noooo… ¿o si?

Mia: Tal vez solo hagan una... ¿parrillada? 

Katrina: O sus cuerpos están quemándose justo ahora… 

Nadie rebate esta vez la sombría suposición de Katrina o le increpa por ser excesivamente truculenta. Todos se quedan en silencio, pasmados por un momento, hasta que finalmente y si previo aviso, Jean despliega sus alas y se eleva por sobre su navío. 

Jean: ¡Sigan adelante! ¡Yo iré a ver que pasa! ¡Big Bird, conmigo! 

Big Bird: ¡Voy! ¡Voy! 

El peliazul entonces se lanza volando tan rápido que mueve las velas de la Spirit, tambaleando el barco, atravesando el mar, dejando una estela en el agua. Sus compañeros mientras, mueven los aparejos para aprovechar el viento al máximo, con las miradas preocupadas. 

Isabel: ¿Creen que los Golden Doubloon hayan…? 

Mia: No, no puede ser eso… 

Jean por su parte, sigue volando por el mar con la misma duda y temor en la cabeza ye do hacia donde surge el humo. Y es entonces cuando lo ve. El Black Roselia esta ardiendo y Tear esta tratando de apagarlo.

Tear: ¡Maldita sea! 

Junto al Black Roselia hay otro barco, uno excesivamente grande. De color oscuro, bandera con un guadaña de dos hojas y lo que mas aterra a Jean, un hombre muerto en su proa.

Jean: Golden Doubloon… no... esto es otra cosa. 

Las otras dos trillizas están en el barco enemigo, enfrentando a una mujer que Jean identifica como miembro de la Tribu de los Hombres cornudos y un tipo raro con una ballesta. 

Michelle: ¿Quiénes son estas estúpidas? 

Kilian: No sé, pero hay que matarlas igual. 

Gift: ¡Inténtenlo si pueden, hijos de su p*ta madre! 

Ink: ¡ Voracious Stain! 

Gift: ¡Shock Box! 

Michelle: ¡Devil Bifork Tongue! 

Kilian: ¡Simply Die! 

La Trilliza de la mancha trata de cegar a sus enemigos con tinta, mientras que Gift emite electricidad e intenta freírlos. No obstante, sus enemigos son ágiles y contraatacan con latigazos y flechas. Las chicas, no planean rendirse aun así, y siguen atacando, o eso harían, pues de la nada un puñetazo salido de la nada manda a Ink al agua.

Gift: ¡Ink!

Viendo esto desde su nave, Tear salta tras ella mientras Gift observa a su nuevo enemigo. Un hombre grande y gallardo, de cabello verde, cicatrices, una guadaña de hoja doble… mirada enfurecida.

Azrael: ¡No hay nadie aquí! ¡Cualquiera de los cuatro que estuviésemos siguiendo, debió deshacerse del rastreador con ellas!

Pero entonces, el hombre siente un escalofrío y mira hacia arriba, creciendo una enorme sonrisa en su cara. Jean esta ahí, estático en el cielo. No se mueve, no hace nada, y por razones que escapan a su comprensión, el peliazul siente temor.

Azrael: Oh… ahí esta… jujujuju.          

Capitulo 648: Azrael

Desde su punto en el cielo, Jean no deja de mirar al hombre de la guadaña de dos hojas, sintiéndose intranquilo por la fascinación con la que este le mira por debajo de sus pies. Luego, este pone sus manos alrededor de su boca para hacer que su voz se eleve, pues hay buena distancia entre ambos. 

Azrael: ¡La verdad, no creí que fuera contigo con quien me iba a encontrar! Eres Jean Black, ¿¡no!? 

El que sepa su nombre no le indica nada bueno a Jean, pero trata de mantener su compostura. 

Jean: ¿¡Quien quiere saber!? 

El hombre bajo el peliazul es el que se muestra sorprendido ahora, sorprendido y confundido. 

Azrael: ¿¡Cómo que quien saber!? *riendo* ¡¿No sabes… je… no sabes quien soy!? 

Jean: ¡¿Debería!? 

Azrsel:¡¿No te acuerdas de mi!? Je…  je

Ante esto, el hombre se empieza a carcajear. Mucho y muy fuerte. Tanto que le duele el abdomen y tiene que limpiarse las lagrimas, lo que pone a Jean aun mas tenso. 

Azrael: ¡Ay… Los niños de ahora! ¡Me sorprende que no te hayan dicho nada en tu “casa”…! 

Jean: ¿huh? 

El hombre entonces extiende sus brazos y empieza a  auto presentarse de forma dramática. 

Azrael: Me conocen por el nombre de “La Guadaña”. Líder de la Sociedad de los Parca. El mejor cazarrecompensas del mundo. Azrael M… 

Pero Azrael no termina de decir su nombre pues Jean le pega un potentísimo codazo en la mandíbula tan pronto oye la palabra “cazarrecompensas”, sorprendiendo para mal a la gente al servicio del autoproclamado mejor del mundo. No obstante, Jean se impacta igual al ver que su nuevo rival da uno, un solo paso hacia atrás.

Jean: (Ese codazo habría noqueado a un pez pesado. ¡Lo he hecho antes, carajo! ¡¿Me están diciendo que este tipo apenas y se inmuto!?)

Azrael solo tiene que devolver la pierna que retrocedió para recomponer su intimidante postura. Este se soba la mandíbula y mueve la boca para acomodarla, aparentemente, el golpe se la saco de la cuenta, pero tras un chasquido, esta en su lugar. 

Azrael : Jojojojo. ¡Si me dolió, ¿eh?! ¡Debo admitirlo! ¡Bien! ¡Eso me gusta! ¡¡Tienes buen jugo! ¡No esperaría menos de un hijo de Black! 

Jean se pone tenso, y mas aun al oír la mención de su padre. El muchacho decide actuar con cautela y  vuelve a tomar su distancia en el aire. 

Azrael: ¡Ah! ¡Precavido! ¡Bien! ¡No mas juegos! ¡No mas mediadores! ¡No mas agentes! ¡Es… mi turno! 

Jean no tiene ni idea de lo que habla Azrael, solo que esta tras de su cabeza. Pero aunque ha enfrentado cazarrecompensas antes, esta vez, se siente abrumado. Azrael, por su parte, vuelve a extender dramáticamente los brazos, alza la cabeza y empieza a reírse de nueva cuenta. 

Kilian: ¡Siiiiii! ¡WUUUUU! 

Michelle: ¡Azzzy! ¡Azzy! 

Los hombres de Azrael empiezan a vitorear, causando ahora tambien la intranquilidad de Gift, que sigue en el barco enemigo, y de Tear, que ha sacado a su martillo de hermana del agua y la lleva cargando del hombro. Mientras, algo comienza a crecer de la espalda del hombre de melena verde. Algo como… ¿brazos con solo cuatro dedos? 

Jean: ¿Un modelo de la Mushi Mushi? 

Azrael: Huhuhahaha. Ni siquiera cerca. 

Pero entonces, el dedo del final de cada nuevo brazo comienza a alargarse más y más, hasta casi tener la extensión del propio cuerpo de Azrael. A la par, una membrana de piel crece entre el brazo y este dedo, creando… 

Jean: ¡Alas! ¡Un murciélago! 

Azrael: ¡Todavía muy lejos! 

Y es que aunque se parecen, las alas, de color verde y negro, no corresponden a la anatomía de un murciélago, aparte estas parecen tener escamas. Por ultimo, le sale una cola larga, y con su sonrisa maligna, Azrael parece el mismísimo Lucifer.  

Ranforrinco

Azrael: ¡Fruta Ryu Ryu! 

De un momento a otro, el hombre desaparece la vista de todos, causando el pánico de Jean y tambien de las Trillizas. Ni siquiera el peliazul con su haki de observación a podido sentir a donde se ha ido. 

Azrael: Modelo del Ranforrinco…. 

Grande es el impacto para Jean al oír la voz y darse cuenta de que una sombra lo ha cubierto. Al mirar arriba lo ve. Una silueta alada mas grande que la suya. 

Azrael: ¡Luzbel Banish! 

Y sin poder hacer nada, ni siquiera verlo venir, Azrael le asesta una patada que incluso rompe la barrera del sonido, creando un trueno y mandando a Pluma Azul Dorada disparado a la cubierta del Santa Morte.           

Capitulo 649: Primero te arrancaré las alas

Jean: Agh…. Maldición. 

Al impactar, el peliazul ha hecho brotar una flor en la madera del Santa Morte, así de fuerte fue el golpe. Viendo como este está dolorido, como cucarachas, docenas de cazarrecompensas se empiezan a aglomerar a su alrededor. 

Gift: ¡Pluma! 

Big Bird: ¡Jean! 

La trilliza de la cicatriz, que tambien está en el barco enemigo y su alado compañero, que se había quedado atrás y al margen, notan lo sucedido e intentan ayudar a su aliado. La primera yendo directamente a por los que le rodean, el segundo, convocando a su tan distintivo ejercito de aves. 

Gift: ¡Shock Box! 

Big Bird: ¡Caw! 

Pero antes de que la chica de cabello rizado pueda intentar cualquier cosa, es obligada a retroceder por un latigazo que, literalmente, deja una muesca en la madera. 

Michelle: ¡Devil Tail! 

La mujer cornuda, con una sonrisa enorme y despreciable, se interpone en el paso de Gift. Big Bird, por su parte, se propone a enviar a su ejército , pero antes de que pueda dar la orden, sus “soldados” empiezan a caer muertos. No heridos, muertos. El motivo: decenas de flechas de la ballesta de Kilian. 

Kilian: ¡Jajajajaja! ¡Poacher! 

Sintiéndose terrible por haber comandado a las aves a su muerte, Big Bird les ordena replegarse y alejarse, mientras el esquiva con dificultad las flechas que ahora van hacia el. 

Kilian: ¡Poacher! ¡Poacher! 

Esto hace que los cazarrecompensas que van hacia Jean puedan hacer lo que les plazca con el… O eso creen… porque en el momento en el que se acercan demasiado…

Jean: ¡Ara Facher! 

… el muchacho bate sus alas y se los quita de encima con solo aire. No obstante, no tiene tiempo de descansar, pues se ve obligado a esquivar a Azrael, que va en caída libre con el talón listo para hundírselo a Jean en la nuca. 

Azrael: ¡Luzbel Punish! 

Jean: Tsk… 

Apenas volando a tiempo para evitar que lo desnucasen, Jean se torna de inmediato en Silber-Schwarzt Harpyie y empieza a volar en círculos amplios alrededor del hombre pterosaurio. 

Jean: ¡Ara Pfeilspitze! 

El muchacho dispara entonces dardos de pluma negros desde su brazo a gran velocidad. Azrael, no obstante, con una sonrisa en los labios, apenas y tiene que moverse centímetros para esquivar. 

Jean: (¿¡Haki de Observación!?) 

Efectivamente, Azrael tiene la habilidad. Y es la misma habilidad en Jean la que no alcanza a predecir a Azrael volando una vez más hacía él a ritmo supersónico, y golpeándolo en la tripa con fuerza bestial. 

Azrael: ¡Behemoth Charge! 

El golpe es tan fuerte que hace a Jean escupir una mezcla de sangre, saliva y vómito, además de enviarlo hacia el cielo como bala. Azrael se dispone a ir tras él , pero se ve interrumpido. 

Ink: ¡Dejalo! 

Ink ha sido devuelta a la seguridad de su nave por Tear y, en un intento de ayudar a Jean, dispara el inmenso arpón de su navío. Pero Azrael lo esquiva fácilmente, y en un segundo, ya esta frente a Ink, para horror de ella. 

Azrael:¡No molestes! 

El cazarrecompensas toma el  cañón de arpón con ambos brazos, y de un tirón, lo arranca del suelo, y luego lo usa como bate para golpear a la trilliza de la mancha. 

Azrael: ¡Behemoth Smash! 

Ink: ¡Gahh! 

Tear: ¡Ink! 

Su hermana de la lágrima, observa todo estando aun en el agua, y, llena de rabia extiende sus brazos sobre su pecho para comandar el agua. 

Tear: ¡Breaststroke Fifty! 

Un torrente de agua se eleva entonces desde su posición hacia Azrael, pero este. Una vez más, esquiva con facilidad. Para luego tambien aparecérsele enfrente, aun con el cañón en la mano. 

Azrael: ¡A la p*ta! 

Tear: Sin tiempo de hacer nada, Azrael hunde a la pobre chica en el mar de un golpe, disparándola hacia el abismo. Aunque algo bueno ha salido de eso, las dos hermanas han dado a Jean suficiente tiempo para recomponerse y, desde el aire, lanza una onda clrtante hacia Azrael con sus manos. 

Jean: ¡Ara Style-Luftsabel! 

Jean espera herir a su enemigo con esto, rajarle las alas, algo. Pero pasa lo impensable. 

Azrael: Ja, ¡Dark Abys Shield! 

Azrael cubre sus brazos de haki de armadura y los cruza sobre su cuerpo, lo que no solo detiene el ataque de Jean, lo reflecta hacia su origen. 

Jean: ¡Gahhh!. 

Seriamente herido por la potencia de su propio ataque, Jean se ve con dificultades para volar, cosa que Azrael aprovecha para darle un codazo en la sien. 

Azrael: ¡Behemoth Impact!

Jean:¡Gahhhah!

El golpe es tan preciso y potente, que por unos, si bien no esta inconsciente, Jean solo puede ver negro. Su cuerpo deja de moverse, como si le hubieran apagado, y sus alas, convertidas en algo parecido a un trapo mojado, ya no pueden elevarlo, haciéndolo desplomarse en el muy destrozado Black Roselia. 

Big Bird: ¡Jean! ¡Jean! 

Gift: ¡…! 

Ni el ave ni la tercera trilliza pueden hacer nada para evitar que Azrael aterrice encima de Jean,  pues Kilian y Michelle no los dejan. El cazarrecompensas pone sus pies sobre el pecho y el cuello del muchacho, medio asfixiándolo y restringiendo su movimiento. Al mismo tiempo, alguno de los subordinados del hombre le grita desde su barco. 

¿???: ¡Ahí le va, jefe! 

• Miembro de alto rango de la Sociedad de los Parca: Hades “El Meteorito”

El subordinado le laza su guadaña de hoja doble, y Azrael la atrapa con una mano. Sin tener l necesidad de mirar, y con una sonrisa. 

Azrael: Gracias , Hades. Ahora. Creo que primero te arrancaré las alas. Se verán bien en mi sala de trofeos. 

Jean: Agh… no… 

Pero justo cuando “La Guadaña” alza aquello que le da nombre, siente un escalofrío y la necesidad de hacerse a un lado de inmediato, corazonada que resulta estar cierta, porque justo en ese momento, del agua sale un chorro de agua tan potente que deja un circulo perfecto en la madera del Black Roselia, cuya cabina ha quedado atravesada de lado a lado. 

Azrael: ¿¡Que carajo… !? 

Jean: Eso es… agh… es… 

Ink y Gift: ¡Tear!           

Capítulo 650: Como estrellas en el cielo nocturno

Unos minutos antes…

La Ocean Spirit aun se dirige hacia el humo, el cual ahora es blanco, cosa que indica que lo que sea que estaba ardiendo ya no lo hace, aunque eso sigue preocupando a los Piratas. Luego, ven decenas de aves volar hacia el lugar al que van. 

Bert: ¡Big Bird debió convocarlas! Jean y Big Bird deben estar peleando. 

Samir: ¿Los Golden Doubloon? 

Luego, escuchan un trueno fortísimo, y luego varios mas. No hay nubes en el cielo así que no pueden ser relámpagos. Todo indica que las cosas no van bien, y de repente, Evangeline y James se ponen pálidos. 

Angélique : ¿Chicos? 

Evangeline: ¡El capitán! ¡Siente dolor! 

Angélique: ¡Bauprés a tope! ¡Necesitamos ir mas rápido! 

Yendo a lo máximo de velocidad que su nave les permite, y viendo aves retroceder , pronto llegan a una distancia donde se puede ver el Black Roselia humeando y otro barco a la distancia. James usa entonces su mira telescópica y Angelíque su catalejo, llenándose de horror por lo que ven. 

Angélique: ¡Jean! 

Su capitán yace herido en el Black Roselia y un individuo desconocido con aspecto de demonio y una hoz para rematarlo. James, veloz y desesperado , carga su arma y se dispone a disparar para salvar a su camarada, pero justo cuando va a halar del gatillo, un torrente de agua sale del mar y casi le arranca la cabeza al enemigo. 

James: ¿¡Qué diablos!? 

Mientras, Jean, viéndose librado de la opresión de su enemigo, trata de incorporarse, pero le cuesta mucho trabajo y solo logra sentarse. Azrael, por su parte, aun sorprendido por lo repentino del ataque, mira a donde este se originó, y a los dos segundos sale otro igual. 

Azrael: ¿¡Que mierda es esto!? 

Todos los enemigos se muestran confundidos, y Jean y Big Bird están igual. Las únicas que parecen saber que sucede son Gift e Ink. Esta última, se va levantando del golpe de Azrael, algo aturdida pero no tan herida como Jean, y al verlo en el suelo, corre hacia el y lo ayuda a levantarse cargándolo sobre su hombro. 

Ink: ¡Pluma! 

Jean: Agh… ¿Qué sucede…? 

La chica solo le dedica una mirada que expresa preocupación total y una palabra como respuesta, o mas bien, un nombre. 

Ink: Tear… 

Acto seguido, se queda viendo hacia el mar. Igual que lo hace Azrael, el cual, mira con sorpresa como este empieza a agitarse y a burbujear como si hirviera en frío. Súbitamente, “La Guadaña” tiene que hacerse para atrás para esquivar otro torrente, pero este es diferente. Este tiene… ¿¡A Tear!? 

Jean: ¿Qué demonios…? 

La trilliza de la lagrima es elevada y suspendida hasta la misma altura de Azrael por una tromba espiral de agua que pareciera devorarla hasta la cintura, abrumando a rodos los que la miran por lo imponente de la escena. 

Jean: ¡…! 

Pero Jean nota algo más, algo que en cierto sentido le hace sentir temor. Los ojos de Tear, normalmente castaños, brillan de color azul en una esclerótica que ahora es negra. Como si fuesen estrellas en el cielo nocturno . Azrael, al tenerla de frente, nota esto también, pero no le da tiempo de pensar al respecto, porque en ese momento, ella alza los brazos por detrás de su espalda para luego bajarlos abruptamente…. 

Tear: ¡Butterfly One Thousand! 

Y generar una monumental ola que se traga a Azrael por completo. 

Azrael: ¡Gahhhh! 

Hombres de Azrael: ¡Jefe! 

Siendo un usuario, sus subordinados de inmediato entran en pánico al verlo desaparecer entre las aguas. Varios de ellos se lanzan al agua de inmediato, ignorando por completo a Tearx wue aparentemente se queda sin fuerzas y cae al agua.

Michelle: ¡Azzy! 

La mujer cornuda, desesperada de ver a su amante en peligro, trata de saltar también, pero olvida un detalle muy importante… aun tenia un enemigo que combatir.

Gift: ¡Tree Lamp! 

Generando electricidad por el método desconocido que ella usa, Gift logra electrocutarla de tal modo que salen pequeñas lucecitas de ella. La mujer cornuda, queda entonces en el suelo, dolorida.

Kilian:¡Malditos! 

Hades: ¡Pagaran! 

Los dos altos rangos intentan atacar a distancia a Jean, Ink y Tear, el primero con su ballesta y el segundo, generando de alguna forma grandes rocas desde sus manos. 

Kilian: ¡Hitman! 

Hades: ¡Asteroid! 

No obstante, antes de que puedan disparar, Kilian es atacado por Big Bird, el cual aprovecha que han cesado el fuego en su contra para rajar el rostro del joven

Big Bird: ¡Tua Claw! 

Hades, por su parte, ve sus proyectiles destruidos por otros que brillan de color rojo. James ha disparado desde la Spirit, que ya esta muy cerca de donde ocurre la batalla. 

Jean: Chicos… 

Angélique: ¡Piratas del Ave Azul! ¡Al ataque! 

Piratas del Ave Azul: ¡Roooooooarrrr!            

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